El Enoturismo es muy importante para que el consumidor valore, conozca y entienda la historia, el proyecto y el esfuerzo que hay detrás de cada botella de vino. Y en el Priorat, donde la viticultura se convierte en una tarea casi heroica, aún más.
En la bodega Vall Llach hace años que tenemos la convicción de que un enoturismo cercano y de calidad, es garantía de prosperidad para el territorio y sus habitantes. Por eso ofrecemos varias visitas mensuales durante todo el año, y organizamos experiencias especiales cooperando con otras bodegas y restaurantes de la zona, para dar a conocer nuestros vinos y la riqueza cultural de la comarca.